Justicia aprueba indemnización a mineros atrapados en 2010

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Cada uno recibirá unos 55.000 dólares, la mitad de lo que en 2018 habían obtenido en un fallo inicial. La Corte de Apelaciones responsabilizó al Estado por el accidente.

La Justicia de Chile ratificó este viernes (11.06.2021) la sentencia que condena al fisco chileno por el derrumbe de la mina San José, un viejo yacimiento donde 33 mineros quedaron atrapados a más de 600 metros de profundidad durante 69 días en 2010, pero rebajó la indemnización a 55.000 dólares para cada uno, la mitad de lo que se les había otorgado originalmente a 31 de las víctimas.

La Corte de Apelaciones de Santiago señaló que el Estado debe pagar esa cantidad por «haber faltado a su deber de protección, actuando con negligencia» y ocasionando «daño moral y psicológico» a los afectados. En 2018, se estableció una indemnización de 100.000 dólares, pero el Consejo de Defensa del Estado (CDE) apeló la sentencia al considerar que ya habían sido compensados con las pensiones vitalicias que reciben, que rondan los 400.000 pesos, cerca de 550 dólares mensuales.

«Si los órganos de la administración del Estado hubieran cumplido con su obligación legal de la forma en que fue previsto (…) los 33 trabajadores no hubiesen terminado enterrados vivos en dicho yacimiento», explica el fallo, que puede ser todavía apelado ante la Corte Suprema. La sentencia determina como principal responsable al Servicio Nacional de Geología y Minas (Sernageomin), un órgano estatal que tenía que «velar por el cumplimiento de las normas de seguridad » y «no actuó, o lo hizo imperfecta o tardíamente».

«Solo quiero tranquilidad”

El derrumbe de la mina San José tuvo en vilo a todo el mundo: los 33 hombres fueron sacados sanos y salvos de las entrañas de la tierra en un rescate faraónico, que despertó el orgullo de todo un país y fue seguido por más de mil millones de personas. Dos de los 33 mineros no se sumaron a la demanda alegando razones personales.

Entre quienes sí lo hicieron se encuentra Mario Sepúlveda, de 50 años, reconocido como el más histriónico del grupo. «Nada va a pagar lo que pasamos, pero a estas alturas de la vida lo que quiero es tranquilidad y paz», dijo a la agencia AFP al comentar el fallo judicial. «Sé que hay compañeros que estos momentos lo están pasando súper mal y que nunca más pudieron trabajar», agregó.

Si bien la gran minería chilena cuenta con estándares de seguridad y tecnología de primer nivel, los expertos y los sindicatos coinciden en que el talón de Aquiles sigue siendo la pequeña minería. El último accidente fatal tuvo lugar hace apenas dos semanas, cuando dos trabajadores murieron tras producirse una explosión en un yacimiento a 400 kilómetros al norte de Santiago.

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