La reciente formación de una alianza sin precedentes en Chile reúne a diversas empresas de telecomunicaciones, operadores de televisión, programadores y plataformas digitales, en una iniciativa coordinada para enfrentar el crecientemente preocupante fenómeno de la piratería digital. Este esfuerzo conjunto busca no solo combatir la proliferación de sitios y servicios ilegales, sino también promover políticas públicas que fortalezcan la industria audiovisual y garanticen espacios digitales seguros para los consumidores. Según datos del Piracy Monitor y estudios de BB Media, la piratería digital ha mostrado un aumento alarmante en todo el mundo, impactando especialmente a Latinoamérica, donde se estima que más del 12% de los hogares acceden a contenido a través de plataformas ilegales.
Las consecuencias de la piratería digital son evidentes y alarmantes. En Chile, aunque no existen cifras oficiales precisas sobre el impacto económico, un estudio de Transunion revela que los usuarios que acceden a sitios ilegales pueden enfrentar pérdidas cercanas a los 3 millones de pesos por fraudes asociados. A nivel regional, la situación es aún más grave, reflejando pérdidas que superan los 500 millones de dólares anuales. Ante este escenario, un total de 12 empresas y asociaciones firmaron un acuerdo histórico para hacer frente al auge de plataformas de televisión ilegal, servicios IPTV piratas y aplicaciones de streaming no autorizadas que están proliferando en el país.
Este pacto fue impulsado por Claro Chile y el Centro de Estudios Regulatorios y de Telecomunicaciones de América Latina (CERTAL), y cuenta con el respaldo de diversas entidades representativas del sector. En la firma del acuerdo, se destacó la reunión de altos representantes de la industria con la Unidad Especializada en Delitos Económicos y Cibercriminalidad del Ministerio Público. Durante este encuentro, se discutieron las estrategias necesarias para abordar la rápida disponibilidad de aplicaciones ilegales en plataformas como Google Store, así como el crecimiento exponencial de la piratería en líneas digitales.
El presidente de la Cámara de Infraestructura Digital (Idicam), Rodrigo Ramírez, subrayó que la economía digital de Chile enfrenta un reto crucial. “Si no se persigue el delito en torno a la propiedad intelectual, toda la industria creativa y de innovación quedará en riesgo”, advirtió, enfatizando que el progreso en este sector está estrechamente ligado a la protección contra prácticas ilegales que minan su fundamentación. Otros líderes del sector, como Alfie Ulloa de ChileTelcos, insistieron en que es esencial construir un entorno digital legal que salvaguarde los derechos de propiedad y fomente la creación de contenido de calidad.
La magnitud del reto que enfrenta la industria audiovisual en Chile y América Latina es considerable. Con pérdidas anuales que superan los 8,000 millones de dólares debido a la piratería, y un impacto significativo en la creación de empleo, donde se estima que se pierden alrededor de 40,000 puestos de trabajo en la región, la colaboración emergente se ve como una respuesta necesaria y urgente ante esta crisis. Francisco Concha de Claro Chile refirió que abordar la piratería digital no debe ser solo un asunto de la industria, sino un desafío de toda la sociedad. Esta nueva alianza representa una oportunidad para asegurar un futuro sostenible y próspero para la economía digital en el país.