Durante el reciente debate presidencial del pacto “Unidad por Chile”, celebrado en el Aula Magna de la Universidad de Santiago, Jeannette Jara, candidata del progresismo, propuso un enfoque radical para enfrentar dos de las mayores preocupaciones del país: el narcotráfico y la crisis migratoria. Con una sólida postura en defensa de la gobernabilidad, Jara enfatizó la necesidad de implementar medidas concretas dirigidas a desarticular las redes del crimen organizado y combatir la inseguridad. Una de sus propuestas más audaces fue la eliminación del secreto bancario como herramienta esencial para rastrear los patrimonios vinculados al narcotráfico, así como la urgencia de fortalecer las capacidades operativas de las fuerzas del orden.
Jara subrayó que el narcotráfico no solo representa un desafío criminal, sino que además afecta de manera desproporcionada a los sectores más vulnerables del país, donde la inseguridad ha ido en aumento. La exministra señaló que las organizaciones delictivas se nutren de la falta de transparencia en el sistema financiero, lo que les permite operar con impunidad. En este sentido, cuestionó la postura de los sectores de derecha que se oponen a sus propuestas y argumentó que la transparencia en las finanzas es fundamental en la lucha contra el crimen, instando a la ciudadanía a exigir medidas que permitan desmontar la estructura económica que sostiene a estas redes criminales.
En relación a la crisis migratoria, Jara se manifestó crítica hacia las respuestas de los sectores conservadores, que insisten en aplicar medidas drásticas como el cierre de fronteras. En contraste, ella propuso fomentar una gestión migratoria más pragmática y humanitaria, donde la regulación y la fiscalización sean prioritarias, tanto en los pasos habilitados como en los no habilitados. La candidata enfatizó que es fundamental encontrar un equilibrio que permita abordar las realidades migratorias sin caer en discursos xenófobos o en propuestas que ignoren la dignidad de las personas.
La candidata del progresismo también hizo hincapié en la importancia de construir un consenso político para enfrentar estos desafíos. Jara argumentó que para combatir la inseguridad es necesaria una institucionalidad robusta que no sucumba ante el avance del crimen organizado o la desinformación. En su visión, los esfuerzos de cooperación entre diferentes sectores políticos son vitales para instaurar políticas que garanticen la seguridad y la justicia social, dejando atrás cualquier intento de polarización o estigmatización de la migración.
Por último, Jara hizo un llamado a priorizar los intereses de la ciudadanía, resaltando que los niños, niñas y adolescentes no deben ser vistos como una amenaza, sino como grupos vulnerables y a menudo olvidados por el Estado. “Debemos proteger a nuestros jóvenes del abandono y de las redes criminales”, enfatizó. En este sentido, la candidata instó a enfocar los recursos y políticas en la construcción de un futuro más seguro y equitativo para todos, reiterando su compromiso de luchar por un Chile más justo.