Sostenibilidad: Empresas obtienen baja calificación en Chile

Compartir

Un reciente informe de la Encuesta ‘Chile Nos Habla’, desarrollada por el Centro de Políticas Públicas de la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián (USS), ha puesto de relieve las calificaciones negativas que recibe el comportamiento de las empresas chilenas en materia de sostenibilidad. La evaluación general alcanzó un modesto 3,7, marcado por puntuaciones aún más bajas de 3,4 y 3,2 para empresas en las respectivas regiones y comunas de los encuestados. Esta tendencia refleja una preocupación creciente entre los ciudadanos, quienes ven la sostenibilidad como un tema crucial, con tres de cada cuatro personas expresando que estarían dispuestas a pagar un extra por productos o servicios que sean respetuosos con el medio ambiente. Sin embargo, un 21,9% admitió poca o ninguna intención de hacerlo, lo que subraya una división en la percepción del consumidor sobre la sostenibilidad y el compromiso empresarial.

El estudio también reveló una clara discrepancia entre las prioridades que la ciudadanía tiene respecto al compromiso empresarial con la sostenibilidad y las acciones que perciben las empresas están llevando a cabo. Entre las principales expectativas, los encuestados destacaron la necesidad de reducir la contaminación que impacta la salud (17,4%) y promover un trabajo digno, seguro y libre de discriminación (17,3%). En contraste, las empresas son vistas como priorizando la reutilización y reciclaje de residuos (15,4%) y mejorar la calidad de vida de sus clientes (13,6%). Esta brecha evidencia que hay un desajuste entre las expectativas y la realidad de la sostenibilidad empresarial en el país.

Según Felipe Bettancourt, coordinador de Impacto Social del Centro de Políticas Públicas de la USS, los resultados de la encuesta reflejan una clara necesidad de alinear mejor las acciones empresariales con las expectativas sociales. Las dos principales acciones que los ciudadanos esperan del sector empresarial se sitúan en posiciones más bajas en la lista de prioridades, sugiriendo una necesidad urgente de que las empresas escuchen y respondan a las demandas de la población en temas de sostenibilidad. Esta desalineación podría tener implicaciones relevantes para la confianza del consumidor y la reputación empresarial a largo plazo.

Las acciones recomendadas por los ciudadanos para mejorar la sostenibilidad empresarial incluyen el uso de energías renovables (45,5%) y la obligación de reportar acciones concretas en este ámbito (30%). Otras medidas destacadas son el reciclaje de residuos (24,9%) y el desarrollo de programas educativos sobre el cuidado ambiental (22,3%). Sin embargo, las empresas enfrentan diversos obstáculos, siendo los principales los costos de implementación (30%) y la falta de conocimientos en sostenibilidad (12,7%). Existe también un clamor por parte de los ciudadanos para que el Estado implemente incentivos tributarios (32,4%) y mejore la claridad regulatoria.

Finalmente, la encuesta ha puesto de manifiesto que la responsabilidad en materia de sostenibilidad no recae únicamente en el sector empresarial o el Gobierno, sino que es considerada una tarea compartida. Un contundente 91,3% de los encuestados opinó que todos los actores deben involucrarse, estableciendo así un llamado a la acción tanto para las empresas como para las autoridades. En el ámbito personal, el estudio mostró que un 77,8% de las personas apagan las luces al salir de una habitación, y un 40% se ducha de manera corta para ahorrar agua, lo cual refleja un compromiso individual con prácticas sostenibles, aunque también revela que aún hay un camino por recorrer en la adopción de hábitos más responsables.

Scroll al inicio