En un esfuerzo por poner en el centro de la agenda pública la situación de las más de 300 mil personas con discapacidad intelectual en Chile, la Fundación Coanil ha presentado un conjunto de 12 medidas concretas en cuatro áreas clave: atención temprana, educación, empleo y vida independiente. Esta iniciativa, dirigida a los candidatos presidenciales, busca que los futuros líderes del país asuman un compromiso real hacia la plena inclusión de este grupo en la sociedad. Nicolás Fehlandt, gerente general de la Fundación, enfatizó que estas propuestas no son reformas inalcanzables, sino acciones que pueden implementarse rápidamente si se cuenta con la voluntad política y social necesaria.
Una de las propuestas más destacadas es la creación de un sistema de atención temprana que acompañe a las familias desde los primeros días de vida de sus hijos. La Fundación sostiene que es fundamental evitar que condiciones iniciales de desarrollo se conviertan en barreras insuperables en el futuro. Además, se plantea la necesidad de que las salas cuna, que reciben financiamiento público, cuenten con equipos interdisciplinarios que faciliten autonomía y aprendizajes desde la infancia para aquellos niños en riesgo de desarrollar trayectorias no típicas.
En el ámbito educativo, la Fundación Coanil advierte de la urgente necesidad de revisar el sistema de subvenciones que actualmente castiga a las escuelas especiales cuando hay ausencias crónicas. Fehlandt expresó que «no podemos seguir castigando a las escuelas especiales reduciendo subvenciones en situaciones de ausentismo», ya que esto perpetúa la falta de recursos necesarios para brindar apoyo donde más se necesita. Es vital, según las propuestas, adaptar el sistema de financiamiento a la matrícula y no a la asistencia y crear un nuevo currículum para la educación laboral de personas con discapacidad intelectual.
El empleo es otro de los temas críticos abordados. Se estima que un alarmante 80% de los adultos con discapacidad intelectual están actualmente desempleados. Para hacer frente a esta situación, Coanil sugiere establecer incentivos para que las empresas contraten a personas con discapacidad intelectual y la creación de un modelo de empleo protegido. Además, se requiere flexibilizar los recursos de la ley de inclusión laboral para que se destinen a fortalecer la inserción laboral de estas personas en todas sus etapas y asegurar su continuidad ininterrumpida en el mercado laboral.
Por último, la propuesta de vida independiente incluye la expansión de programas de viviendas tuteladas y la creación de un servicio de asistentes personales que fomenten la autonomía de las personas con discapacidad intelectual. La Fundación Coanil hace un llamado a que todos estos puntos sean parte integral de la discusión en las campañas electorales, con el fin de avanzar hacia un Chile más inclusivo y justo, en el cual la discapacidad intelectual no se traduzca en exclusión, sino en una oportunidad para el desarrollo y la dignidad.