En sus proyectos socioambientales, la empresa lleva a cabo una estrecha estrategia de vinculación con diferentes localidades, estableciendo fronteras de trabajo y diálogo comunitario para el desarrollo del sector y sus desafíos.
Los retos relacionados con la participación ciudadana incluyen desde la necesidad de garantizar que los proyectos de energía se desarrollen de forma eficiente y sostenible hasta impulsar y desarrollar relaciones integrales de confianza y diálogo.
Y es que cuando se trata de liderazgo en el proceso de transición energética en un país lleno de desafíos como Chile, Transelec lleva la delantera en innovación y políticas transversales e integrales que convierte a la empresa de transmisión más relevante del país en un agente de cambio en el sector.
Como parte de robustecer estos procesos, el liderazgo de Paola Andrea Basaure Barros es fundamental. La vicepresidenta de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Transelec tiene una larga trayectoria en relaciones comunitarias y diálogo, específicamente en procesos de participación ciudadana.
La función de Transelec va más allá del desarrollo de infraestructura, sino que su trabajo se aborda desde una perspectiva socioambiental, donde los proyectos se integran y vinculan.
Desarrollo de la estrategia de vinculación de Transelec
Así, la empresa ha puesto en su centro los pilares de sostenibilidad, clientes y crecimiento desde sus inicios, entendiendo que la participación y la vinculación son atributos clave para un trabajo organizado y coordinado.
Así, la empresa ha visto fortalecida su estrecha relación de confianza con las comunidades a través de diferentes instancias de mejora continua, como por ejemplo el plan de Estrategia Corporativa “Comunidades y Valor Social” impulsado en 2022.
Su política es clara: un estilo de gobernanza claro y transparente, con objetivos sostenibles definidos y un profundo sentido de ética y cumplimiento.
A modo de ejemplo, Transelec ha apoyado iniciativas en cultura, inversión social y desarrollo de proyectos sociales, cumpliendo sus propias metas en torno al relacionamiento comunitario, estrategias de mitigación de ruidos e incluso verificación de huella de carbono.
Los frutos de ese trabajo se reflejan en la madurez alcanzada en la relación con las comunidades y localidades a través de la estrategia de relacionamiento comunitario, “Comunidades y Valor Social”.
Esta estrategia surge de la preocupación por la necesidad de adaptarse a un entorno social en constante cambio y de continuar estableciendo un vínculo cercano y transparente con las comunidades locales.
En el centro de esta relación está la construcción de confianza con los vecinos, lo que promueve el entendimiento mutuo y permite una mejor integración en la comunidad. De este modo, se aborda de manera conjunta y con responsabilidad los desafíos sociales, fomentando una actitud de empatía.
“Nuestra empresa está implementando políticas y prácticas pioneras en el sector. Con más de 20 años de experiencia en participación y medio ambiente, me desempeño en la creación y crecimiento de equipos multidisciplinarios para desarrollar proyectos socioambientales transformadores”, señala Paola Basaure.
Paola Basaure detalla que “este plan entrega las directrices para un crecimiento continuo a largo plazo, estableciendo metas, planes de acción y una gobernanza que asegure la integración de esta visión en todas las actividades de la empresa”.
Lineamientos base
Para abordar el pilar de Sostenibilidad, en 2023 se llevó a cabo un análisis de materialidad y una evaluación de línea base. Estos estudios tienen el propósito de enfocar esfuerzos en aspectos que afectan a toda la empresa, identificando y abordando brechas para generar valor tanto interna como externamente.
En el diseño de la estrategia, se ha priorizado el fortalecimiento del entendimiento del entorno, el marco regulatorio y normativo aplicable, además de las relaciones con los grupos de interés internos y externos, con el objetivo de identificar y gestionar riesgos y oportunidades que permitan un impacto positivo en línea con la estrategia de negocio.
La importancia hoy en día de los diálogos comunitarios y la integración de proyectos socioambientales va más allá del cumplimiento de estándares técnicos. Su relevancia radica en la construcción de confianza y el fortalecimiento de iniciativas que permitan a las empresas conocer a las comunidades, levantar sus inquietudes y necesidades y trabajar en conjunto en torno a los desafíos mutuos.
En ese sentido, el rol de Paola Basaure en la dirección de estas políticas destaca la necesidad de impulsar el diálogo intersectorial para colaborar en la transición energética, asegurar alianzas estratégicas, impulsar colaboraciones y promover sinergias público-privadas.
Valor socioambiental
Una vez comprendidos los impactos, riesgos y oportunidades, se han diseñado los pilares de la estrategia de negocio sostenible. La idea, es desarrollar un plan de acción para el corto y mediano plazo, con el fin de trabajar en los objetivos establecidos.
Además, se llevarán a cabo talleres de sensibilización y capacitación para fortalecer el entendimiento y la cultura sostenible dentro de la empresa. El compromiso de la empresa es mostrar esta estrategia de negocio sostenible y sus resultados en el futuro. “De todas maneras ya se han realizado avances en aspectos estratégicos y en iniciativas”, señala Basaure Barros.
Esta estrategia trabaja según ciertos criterios y objetivos de base:
- Energía comunitaria: Mejorar las condiciones de vida en las comunidades mediante acciones dirigidas a resolver problemas relacionados con el acceso, la equidad o la calidad de la energía. Estas acciones deben contribuir al desarrollo humano y económico del grupo.
- Desarrollo local e infraestructura: Apoyar el bienestar y el progreso de personas y comunidades que se encuentran en situaciones socioeconómicas desfavorecidas.
- Adaptación y resiliencia: Colaborar con la comunidad para diseñar medidas locales que reduzcan la vulnerabilidad ante los riesgos asociados con el cambio climático.
- Promoción de la cultura local: Respaldar iniciativas que promuevan la conservación y el desarrollo del patrimonio cultural, tanto indígena como no indígena, y fomentar la difusión de actividades y expresiones culturales que refuercen la identidad.
Testimonios de relacionamiento comunitario
Como parte del fortalecimiento de la relación con las localidades, Transelec gestiona y lleva a cabo diferentes programas en colaboración con las personas que habitan en sectores donde la empresa opera.
Esto, se realiza a través de estrechas relaciones de diálogo, según comenta Paola Basaure, “se llevan a cabo actividades como mesas de trabajo quincenales, procesos de participación ciudadana, presentación e implementación de proyectos de inversión social y otras instancias”.
La idea es invertir en la comunidad y desarrollarlo de forma participativa, contando con el respaldo de consultores especializados y trabajando directamente con las directivas de las distintas organizaciones involucradas en las mesas de trabajo.
Así, Transelec ha trabajado en el desarrollo de más de 70 proyectos de infraestructura comunitaria en 23 localidades del país organizadas en mesas de trabajo y también en 22 escuelas.
Por otro lado, se brindó apoyo a 51 eventos como celebraciones del Día del Niño, We Tripantu, Navidad, fiestas deportivas y aniversarios comunitarios, entre otros.
Este tipo de vínculo no sólo está relacionado a inversión social en infraestructura como plazas o celebraciones, sino también en el fomento de la educación y el emprendimiento.
En ese sentido, la empresa apoya a comunidades educativas por medio de programas específicos hacia los estudiantes con el fin de proporcionar, por ejemplo, conocimientos sobre energía, habilidades basadas en el método científico y competencias vinculadas con la cultura científica.
De esta manera, podrán convertirse en agentes de cambio, capaces de enfrentar desafíos y ayudar a resolver problemas en el campo de la energía y la sostenibilidad. Al respecto, Paola Basaure detalla que, “el programa se llevó a cabo en 19 escuelas ubicadas en 9 regiones y 15 comunas, beneficiando a un total de 478 estudiantes de 4º básico”.
Conectando y transmitiendo valor
La experiencia de incorporar la participación ciudadana en los proyectos dirigidos por Paola Basaure no solo demuestra un firme compromiso con el desarrollo sostenible, sino que también resalta la profundidad de su visión estratégica para desarrollar proyectos que sean más aceptados y exitosos.
Esto, a su vez, ayuda a formular mejores propuestas para el sector Energía en el país. En Transelec, se trabaja constantemente para generar valor en las comunidades. Las instalaciones se diseñan, construyen y gestionan con un enfoque en minimizar los impactos, por ejemplo, asegurando la mitigación, vigilancia y control de las emisiones de ruido.
Como parte de esos avances, se avanzó en implementar herramientas de manera sistemática y progresiva, integrando innovación e investigación para abordar los desafíos relacionados con el ruido, consolidando la tecnología de cancelación activa de ruido como una herramienta para ser instalada en subestaciones.
Durante la fase de construcción de los proyectos, se consideran medidas para mitigar los posibles efectos de actividades como el tránsito de vehículos o el polvo. Además de cumplir con la normativa vigente, se ofrece a los vecinos el Sistema de Gestión de Comunicaciones (SGC) para recibir dudas, quejas y solicitudes.
La compañía continúa buscando y desarrollando nuevas tecnologías para cumplir con los objetivos de mitigación y generación de valor. En la etapa de desarrollo de los proyectos, se realizan procesos de participación ciudadana anticipada (PACA) de manera voluntaria y, en algunos casos, antes de ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), aproximadamente seis meses antes, según comenta Basaure.
Durante la tramitación en el SEIA, se llevan a cabo procesos de Participación Ciudadana (PAC) y consultas indígenas cuando corresponde, para respetar la normativa y los estándares aplicables. Además de las medidas reguladoras, se establecen Compromisos Ambientales Voluntarios (CAV) para contribuir proactivamente al bienestar de las personas afectadas y enfrentar desafíos sociales más allá de los requisitos normativos.