En un giro inesperado en la contienda presidencial chilena, la presidenta del Partido Socialista (PS), Paulina Vodanovic, anunció este lunes su decisión de retirar su candidatura a la presidencia, a tan solo dos días del vencimiento del plazo para inscribir a los candidatos en las primarias legales. Esta declaración fue realizada a través de una carta enviada a los militantes y directivos del partido, marcando un cambio radical en su posicionamiento político, apenas 15 días después de haber sido proclamada como la abanderada por el comité central del PS.
La decisión de Vodanovic ha causado revuelo dentro del partido, que se había mostrado hasta ahora unánime en su apoyo a la senadora. Sin embargo, su candidatura había suscitado tensiones internas considerables, debido a los bajos índices de apoyo que había recibido en las encuestas y a las críticas que apuntaban a que su postulación podría dividir al Socialismo Democrático. Entre las voces discordantes, varios militantes habían señalado al exministra del PPD, Carolina Tohá, como una opción más viable para unificar y fortalecer la imagen del PS frente a las elecciones.
Los temores relacionados con un posible mal desempeño de Vodanovic en las primarias eran palpables, ya que algunas proyecciones insinuaban que podría terminar relegada a la cuarta posición. Esto no solo afectaría el prestigio del PS, sino que también podría comprometer las posibilidades de la senadora para ser reelegida en el Congreso. En su afán por reafirmar su independencia, Vodanovic había declarado en su momento: “No somos la continuidad de este gobierno, somos otra cosa, somos más que un puesto en el gabinete o un cupo en una coalición”, un mensaje que, sin embargo, no logró consolidar el apoyo necesario.
Durante su breve pero intensa carrera por la candidatura presidencial, Vodanovic también enfrentó complicaciones como la controversia generada por la destitución de la senadora Isabel Allende, que se produjo tras la fallida adquisición de la casa de Salvador Allende. Con la situación interna del partido en momentos críticos, se esperaba que el comité central se reuniera para evaluar la gestión de Vodanovic al frente del PS, aunque la atención se centraba en la evaluación de su candidatura y los efectos que esta podría tener sobre el futuro del partido.
A pesar de terminar su candidatura, Vodanovic dejó claro que no desea ser una fuente de división para el Partido Socialista, expresando su propósito de fortalecer a la colectividad desde su posición como presidenta. En un reciente encuentro con líderes de partidos oficialistas, se planteó la necesidad de reactivar el proyecto político del Socialismo Democrático y se discutieron posibles colaboraciones entre secretarios generales de diversas colectividades. Aunque se espera que en su carta de renuncia Vodanovic no exprese un respaldo directo a Tohá, su intención de abrir un diálogo para buscar apoyos programáticos podría allanar el camino para la nueva fase del PS en el proceso electoral.